Pese a que cada agencia tiene su propia identidad y valores, la vida y el quehacer diario de los creativos parece ser muy similar, lidiar con los clientes, innovar en ideas y abatir el estrés son algunas de los puntos en común de michos diseñadores y publicistas.
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El fotógrafo Derrick Lin ha elaborado durante ya semanas atrás una serie de fotografías que ha compuesto con elementos de la oficina de un creativo y curiosas figurillas miniatura que vienen a colación para escenificar los gajes del oficio de quienes trabajan en una agencia.
Derrick Lin ha subido sus fotografías a Instagram, las cuales representan lo que para él es el día a día de una agencia creativa. Con gran imaginación y sentido del humor este artista muestra que en ocasiones el quehacer diario es tan absorbente que se deja de pasar tiempo con la familia, pero que al final cuando el cliente aprueba un proyecto todo puede ser felicidad.
Seguramente más de uno se sentirá identificado con estas imágenes y las situaciones que expresan de una manera divertida.
Para despertar y liberarse del estrés, nada como una taza de té
Pueden pasar horas para que un cliente dé su opinión sobre un proyecto creativo
Algunas veces se necesita ayuda urgente, sobre todo cuando las cosas eran para ayer.
Ante las filas de trabajo, se necesita la tenacidad de un escalador para lograr el objetivo.
Los viernes, al finalizar un proyecto o al ganar un pitch la oficina puede ser una fiesta.
Para quienes trabajan en una agencia, creativo puede ser un sustantivo y concepto un verbo.
La selección de un simple color puede ser una tarea extenuante.
Mientras los clientes pasan tiempo con sus familias, los creativos regularmente no.
Nada mejor que un fin de año lleno de exitosos y originales proyectos.
Ante esta satisfacción no queda más que agradecer a todos los miembros del equipo.
Y al final, sólo queda volver a empezar un nuevo año con muchas expectativas creativas.
