Hoy se conmemoran 65 años de la muerte de este muralista mexicano que sin duda tenía un talento creativo inigualable, pues en cada una de sus obras logró plasmar sus ideas e inconformidades sobre aspectos políticos y sociales, pero sobre todo adornó la ciudad durante el siglo XX.
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La ciudad de México no sería la misma sin los murales que la adornan, obra de José Clemente Orozco, el jalisciense que le dio vida al ahora Museo de San Ildefonso, el Palacio de Bellas Artes, la Casa de los Azulejos, el Museo de Arte Moderno y el Castillo de Chapultepec.
01. En el Antiguo Palacio de San Ildefonso habitan varios de los murales de Orozco, entre los que destaca el que muestra su interpretación de Hernán Cortés y la Malinche.
02. Basta con visitar una sola vez el restaurante que alberga la Casa de los Azulejos y darse cuenta que varios de los comensales admiran y posan para tomarse fotografías junto a este magnífico mural llamado Ominciencia.
03. En 1934, Orozco pintó en Bellas Artes su mural Catarsis, el cual le ha dado un toque a este edificio es tan importante para la cultura y las artes de México.
04. Otro edificio emblemático para México es el Castillo de Chapultepec, en el cual también puede apreciarse la obra de este jalisciense que hoy cumple 65 años de muerte. En este mural se representa al héroe de muchos mexicanos al liberar al país del imperialismo.
05. El estilo peculiar de José Clemente Orozco siempre tuvo un toque que remite a la mexicanidad, el cual incluso exportó a otros países es el caso del mural en la Biblioteca Baker, Dartmouth College, New Hampshire en EUA.
Además de muralista también fue pintor, caricaturista y crítico político a través de sus creaciones.
