No se trata precisamente de una obra de arte presentada oficialmente por la publicidad y equipo de marketing de la FIFA o de alguna marca patrocinadora, sino de una obra independiente en donde se refleja la vida miserable de millones de brasileños rumbo al inicio del Mundial 2014.
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Todo el colorido, la buena vibra, la arquitectura y la cultura que se vive en Brasil es una de las que más predominan actualmente en todo el mundo desde antes del anuncio del Mundial 2014 y las próximas olimpiadas, pero también se sabe que existe un alto índice de pobreza.
Para reflejar precisamente eso, la pobreza y el estilo de vida un tanto miserable que llevan gran parte de la sociedad brasileña, el artista urbano Paulo Ito resalta esos rasgos en una pieza de arte situada en alas calles de la cuida de Sao Paulo.
Para incomodidad de los organizadores de la FIFA, la imagen se ha viralizado en las diferentes redes sociales y medios de comunicación. La obra tiene como objetivo resaltar algunos puntos importantes de esta edición del mundial, principalmente el contraste de todo el show que se realizará y los gastos invertidos dentro de un entorno donde las condiciones de viva es muy pobre.
La pieza que Ito pintó en Sao Paulo muestra a un niño brasileño, hambriento y dispuesto a comer algo, pero llora al notar que en su plato no hay comida sino un balón de fútbol. La escena sintetiza uno de los aspectos más criticables ante la siguiente Copa del Mundo.
Al respecto el artista se muestra sorprendido del éxito de su pieza y comenta: “La verdad es que hay tantas cosas mal en Brasil que resulta difícil saber por dónde empezar. Mi intención no es afirmar que no se está haciendo algo en contra de la pobreza, pero debemos mostrarle al mundo, o a nosotros mismos, que la situación aún no es buena“. Una obra de arte considerada como anti-mundial.
