El presidente de China Xi Jinping ha declarado que no quiere más arquitectura rara en su país, luego de que la tendencia de los arquitectos se ha orientado hacia el diseño de edificios con formas extravagantes que poco tienen que ver con una construcción convencional o tradicional de la nación oriental.

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Arquitectura, ¿para quién?

El presidente chino ha criticado proyectos arquitectónicos que no tienen formas usuales, pero el que más atacó fue un edificio que ha sido comparado con la forma de un pene erecto. “No más arquitectura rara” dijo el mandatario para el sitio web oficial del estado chino.

edificio pene China

Esto se debe a que ha habido un boom de edificios que han sido comparados con órganos sexuales, como el puente sobre los ríos Yangtze y Jialing en Chongqing cuya forma fue comparada con los genitales femeninos.

Otro caso ha sido el edificio apodado el gran pantalón, que aunque no tiene una forma sexual es una estructura rara ante los ojos de los espectadores, pero especialmente del mandatario Xin. A esto también se suma un edificio cuyo diseño arquitectónico asemeja una dona gigante.

edificio dona China

Ante estas tendencias, el presidente chino aseguró que no deben sacrificarse los valores artísticos de la arquitectura por privilegiar a lo comercial, aunque el arte siempre es subjetivo habrá quienes digan que estas formas de expresión son aún más artísticas que las construcciones que no innovan en diseño y se limitan a seguir los paradigmas tradicionales.