Las redes sociales, la tecnología y la geolocalización han detonado la aparición de concursos y promociones online que buscan capturar la atención y participación de los usuarios en torno a las marcas. A todos nos llegan a diario, propuestas para subir fotos o videos al Facebook de una marca o a la página de algún producto, con la promesa de que quien más likes o votos reciba será el ganador. Estas mecánicas además de trilladas y aburridas, ya no tienen nada de creativo. En muchos casos, se tiene la creencia de que si se pide mucho esfuerzo el consumidor no va a participar. En este sentido, Juan Diego Gómez, codirector de Clarus Create de la agencia Clarus Digital, recomienda cuatro principios básicos para generar concursos online creativos y exitosos. Los puntos que hay que tener en cuenta para asegurar el éxito de un concurso en marketing digital son los siguientes:

Investigación de público meta. Es necesario investigar quiénes son los potenciales participantes, así como los dispositivos que utilizan, para qué los usan, su nivel de dominio tecnolígico, en qué redes sociales están y para qué las utilizan. Por ejemplo, si el público objetivo son amas de casa con tiempo libre por las tardes, usan la computadora de casa y utilizan Facebook para compartir las fotos familiares, ya tenemos información valiosa para poder plantear un concurso adecuado.

Uso no habitual de la tecnología. Hay que sacar a los usuarios del uso diario de la tecnología al que están acostumbrados. Cuando se logra que los usuarios interactúen con las redes sociales de una modo distinto al habitual, se captura su atención gracias a este novedoso recurso. Un ejemplo de esto es la aplicación para Facebook  de la marca Burger King, Whooper Sacrifice, la cual invita a eliminar algunos contactos del muro a cambio de una hamburguesa. El concurso se convierte en un éxito pues ofrece la novedad de no hacer amigos (para lo que está hecha una red social) y por el contrario reta a quitarlos de la cuenta personal.

Nivel experiencial. Es primordial que el usuario viva una experiencia conectada a una emoción (juego, humor, miedo, historia, etc.) y que ésta se mantenga durante todo el proceso, de eso dependerá el éxito del concurso. Si el nivel experiencial es elevado, generalmente la gente participará aunque no tenga ninguna expectativa de ganar, sólo por gozar la experiencia. Por ejemplo, Coca-Cola planteó la llamada Máquina de la amistad, donde los usuarios podrían obtener dos bebidas al precio de una si lograban, en un dispensadora más alta de lo convencional presionar el botón 2×1. Para ello, la gente tenía que trabajar en equipo para alcanzar el botón. Una iniciativa que logró miles de comentarios en redes sociales en los siete países donde se implementó la propuesta.


Premio atractivo. El premio en un concurso es muy importante, lo cual no reside precisamente en que sea caro o grande. Si así, está perfecto, pero mucho del atractivo reside en que sea original y único, incluso personalizado, lo cual lo hace poderoso.

 Fuente: Clarusdigital.com