Todos hemos escuchado la frase “de ver, dan ganas” y se refiere al poder que tiene lo visual en la decisión de la personas. El ejemplo puede ser utilizado en muchos contextos, pero en lo que se refiere al diseño de portadas impresas, habla sobre la responsabilidad que tiene la tapa frontal para incitar al lector a que adquiera el libro o revista.
Quizá te interese: Diseño editorial: las 10 mejores portadas de revistas de EEUU.
Con ello en mente te presentamos las cinco consideraciones en el diseño de portadas impresas que tienes que dominar.
- Retoma los principios básicos del diseño:
Al igual que otro producto, debes cuidar el diseño sin olvidar sus elementos básicos como el contraste, la paleta de color, repetición, alineación, proximidad y demás elementos para una correcta composición visual. - Información:
Es una portada, por lo que debe presentar la información necesaria que requiere el cliente para que se interese. - Elige un protagonista:
Este elemento será quien capte la atención de los lectores, por lo que debe ser lo suficientemente llamativo sin perder el sentido o contexto de lo que trata el texto. - No olvides las tendencias:
Aunque un texto dura cientos de años, el estilo de su publicación impresa tiene que concordar con las tendencias actuales, procura adaptar una que te guste y se combine con el punto anterior. - Memorable:
Se trata del “chispazo de creatividad” que hará memorable a la portada. Puede ser el distintivo, la técnica del gráfico o algo innovador en el diseño.
