El estrés puede ser el resultado de todo lo que no podemos manejar en la rutina laboral o las dificultades que no prevemos al realizar nuestros proyectos de diseño. Pero las consecuencias del estrés en nuestro organismo pueden ser muy graves si no la sabemos manejar del todo bien, por ello te presentamos 5 maneras de reducir el estrés a la hora de desarrollar tus actividades de diseño.

Estas maneras de reducir el estrés también te pueden ayudar después de una larga jornada de trabajo en la que es necesario calmar los nervios al final del día, justo antes de dormir y así deshacerse de las diferentes formas de estrés que cargamos en nuestro día a día.

1.Haz una lista de tareas
Si tu principal problema de estrés es sentir que tienes muchas cosas que hacer, son tantas que ni siquiera las recuerdas bien o o te da tiempo de hacerlas. Escribir una lista de tareas no sólo servirá para organizarte, sino que le dará orden a tu cerebro y te ayudará a quitarte la sensación de que tienes que hacer todo al mismo tiempo.

2. Reorganizar
Reorganizar tu lugar de trabajo puede ayudar a tu cerebro a relajarse, ya que nuevamente tendrá la sensación de orden y de hacer completado una pequeña tarea. Además te ayuda a olvidarte un poco de la tarea que te está ocasionando estrés. Después de reorganizar vuelve a tus actividades más relajado.

3. Una taza de té 
Si quieres relajar tus nervios y reducir tu estrés al final del día, tomarte una taza de té caliente de manzanilla o menta, despejar tu mente y concentrarte por unos momentos en ti mismo. Estas dos infusiones tienes propiedades relajantes que le ayudarán a tu organismo.

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4. Haz ejercicio
A veces la manera de reducir el estrés es olvidarse del tema que te lo causa por un tiempo, salir a correr o hacer ejercicio libera endorfinas que mandan señales al cerebro para reiniciarse y buscar un nuevo enfoque a los problemas. La actividad física no falla y además le hace bien a tu salud.

5. Bájale a la cafeína
Demasiada cafeína en tu organismo produce que tu cerebro y tu cuerpo se muevan más rápido de lo habitual. Por ello es que una taza de café por las mañanas te activa, pero si ya es la cuarta del día y le sumas el estrés de un nuevo diseño que te encargaron para ayer, el resultado será una sobrecarga de estrés.