¿Por qué no haces ejercicio? Ya sabemos lo que vas a responder: que tu carga de trabajo es intensa, que no encuentras la hora de dedicarle tiempo a tu cuerpo, que el gimnasio es lejano o costoso, que no hay áreas deportivas en tu localidad… para no realizar actividades físicas -en beneficio de tu propia salud- siempre es fácil encontrar excusas.

Pero querer es poder y si de verdad quieres mejorar tu condición física verás que no necesitas membresía de gimnasio alguna ni el más sofisticado equipo, basta dedicar unos minutos al día aunque te encuentres

1. ¿No trabajas lejos de casa? Camina al trabajo o usa una bicicleta. Si usas transporte público, bájate un poco antes y camina hacia tu centro de labores. ¿Tienes automóvil, por qué no lo dejas en casa algunos días a la semana?

2. Levántate de vez en cuando de tu escritorio, restirador o pupitre, mantente en movimiento y quédate de pie a ratos. A veces solemos usar líneas telefónicas o aplicaciones de mensajerías instantánea para comunicarnos con los creativos y colegas dentro del mismo centro de trabajo. No los uses, levántate y ve a sus lugares, la comunicación será, además, más efectiva.

3. Si es posible, reemplaza tu silla por una pelota de ejercicio, al menos por unos minutos.

4. Realiza diferentes ejercicios desde tu lugar, levanta y extiende las piernas y los brazos cuando estés sentado en tu lugar. Haz series de 15 repeticiones y resiste al menos tres segundos con las extremidades levantadas antes de regresar, despacio, a la posición original.

5. Realiza estiramientos para el cuello, caderas y todas las partes de tu cuerpo que tienen movilidad.

6. ¿Tienes que utilizar todo el tiempo el elevedor? Claro que no, usa las escaleras.

7.- Cuida lo que comes, si abusas de las grasas y loz azúcares no tendrás ánimo de realizar actividad física. Bebe mucha agua y evita, en la medida de lo posible, el café y los refrescos.