Sin importar la especialidad de la creatividad visual a la que te quieras referir, existen reglas que se pueden aplicar a cualquier tipo de proyecto gráfico. Ya sea un diseño digital, un trabajo de branding, una serie fotográfica, un cartel, ilustración, portada, diagramación o una pieza artística, estas ocho normas elementales que te vamos a recordar te ayudarán a seguir con éxito tu próximo proceso de diseño.
1. Convencionalidad
Los códigos gráficos de cualquier proyecto deben estar culturalmente vigentes. Emplear nuevos lenguajes gráficos puede no resultar funcional si estos no se comprenden. El primer objetivo del diseño es hacerse entender y transmitir un mensaje con eficacia.
2. Originalidad
Esta cualidad permite a cualquier proyecto hacer un contrapeso al concepto de convencionalidad. La originalidad y el convencionalismo serán capaces de lograr un equilibrio en tus trabajos distintas dependiendo del estilo, método y el mensaje que se desarrolle.
3. Eficacia
Todo diseño debe ser eficaz para todas las funciones para las cuales ha sido pensado y desarrollado. La estética jamás podrá anteponerse a la funcionalidad, al contrario deberá potenciar el ejercicio comunicativo.
4. Propiedad
Un diseño debe ajustarse a la identidad y la necesidad del cliente que lo encarga.
5. Respeto
La gráfica debe ajustarse y respetar los códigos del receptor. Se habla para él, para que él entienda.
6. Densidad
Un diseño no puede tener zonas privadas de sentido. Si al eliminar un elemento no se pierde nada significativo, es porque ese elemento sobraba desde un principio.
7. Economía
Hay que evitar redundancias superfluas o excesos gráficos, de debe prestar tanta atención o incluso más a las zonas vacías de una propuesta. en muchas ocasiones el vacío es lo que da sentido al trabajo global.
8. Autonomía
La comunicación publicitaria debe ser autónoma, libre de referencias a su proceso productivo o su autor. Pertenece al emisor y su producción debe volverse invisible.