Los stickers son uno de los recursos del diseño que siempre son útiles para promocionar las marcas, pero regularmente se recurre a ellas cuando no se cuenta con diseños impactantes en otros recursos como el packaging.
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El uso de adhesivos impresos mejorar el packaging no sólo aumenta la conciencia de la identidad de marca, sino que añade un toque personal y ayuda a construir la lealtad y la confianza con el cliente.
El uso de stickers en el embalaje es parte del llamado marketing personalizado, que como estrategia de diseño ayudará a las marcas. Incluso algunas sólo pueden decir gracias y esto tiene un efecto psicológico en los clientes de la marca.
Lo anterior se debe a que forma parte de la experiencia del cliente y cuando son nuevos clientes, este tipo de acciones ayudan a que regresen.
En cuestión de diseño habrá que tomar en cuenta:
1. El tamaño y la forma
Existe una gran variedad de tamaños y formas disponibles. Desde diseños redondos de 25 milímetros de diámetro, hasta A3, por lo que puede elegirse entre una amplia gama de formas circulares, rectangulares o cuadradas, a todo color, etiquetas autoadhesivas y pegatinas. Incluso hay opciones resistentes al agua
2. El mensaje
Recuerda mantener la regla número uno del diseño: manténlo simple. El contenido del mensaje debe acomodarse al espacio con el que cuentas, pues en algunos casos no podrás incluir el logotipo de la marca, en otros si, o solamente una leyenda que exprese el mensaje que se quiere transmitir, como un “gracias”. También se pueden incluir direcciones web o un código QR. Lo ideal es no poner mucha información.
3. Color
Sin importar la forma o el tamaño, recuerda imprimimos a color, pero con una tonalidad que realmente la haga destacar del resto del empaque y que por su puesto no rompa con la paleta de color de la marca.
