Como ya es de reconocerse el lado travieso, desobediente y rebelde de la marca de moda American Apparel, vuelve a hacer de las suyas, ahora presenta una campaña en donde muestra su lado social en contra del maltrato de las mujeres musulmanas, por lo que presenta a una mujer de dicha religión semidesnuda.

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Provocación y conciencia social, es lo que la marca estadounidense desea provocar en su último anuncio gráfico, el cual se caracteriza, como todos los demás, por su alteración sexual y su morbo. Pero para esta campaña, el mensaje es otro, es el de la unión y el respeto hacia la mujer.

El anuncio es protagonizado por Maks, una joven bangladesí de 22 años que trabaja para American Apparel. Aunque nació en Dhaka (Bangladesh), Maks se trasladó a la edad de 4 años a California. La joven decidió aparecer en topless para este anuncio, debido a la presión que se tiene hacia las mujeres en la comunidad islámica.

Firme frente a la cámara y con las las palabras “Made in Bangladesh” , Maks dice haberse distanciado últimamente del Islam, reconoce haber crecido en el seno de una familia musulmana muy conservadora. Más allá de buscar la controversia mediante un desnudo protagonizado por una mujer musulmana, American Apparel pretende denunciar la situación de esclavitud en la que viven muchas mujeres en las múltiples fábricas de ropa que trabajan para multinacionales en Bangladesh.

Al cartel se une el eslogan, haciendo referencia a los pantalones irónicamente, “100% made in USA”, asegura la marca. “En su fabricación intervinieron 23 empleados estadounidenses cualificados que trabajan en nuestra sede central en Los Ángeles. Todos ellos reciben un salario justo y tienen acceso a beneficios básicos como la sanidad”, recalca la compañía en el anuncio.

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