Las grandes marcas son las que logran posicionarse  en la mente del consumidor. “Los resultados de su campaña, dependen menos de cómo escribimos su publicidad y más en como está posicionado su producto” escribió el señor Ogilvy en su artículo “La publicidad que vende”.

Aunque el diseño de la imagen de un producto es vital para que los consumidores lo reconozcan a primera vista, las grandes marcas exploran la posibilidad de crear una línea de productos variados y experimentar con el diseño de sus empaques y logotipos.

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Este tipo de estrategias estarán encaminadas a ser exitosas siempre y cuando el branding de la marca sea lo suficientemente fuerte, entendiendo el término como la gestión estratégica y/o creativa del conjunto de activos intangibles y tangibles (atributos, percepciones, conductas o valores) de identidad vinculados a una marca, de tal manera que sean coherentes, atractivos, apropiados y distintivos para el consumidor y generen valor al accionista, Según Víctor Mirabet, en el libro El valor de la marca para el consumidor: compendio de modelos para su evaluación, de Luis Miguel Bernardos.

Me atrevo a decir que la marca mejor posicionada en la mente de los consumidores a nivel mundial es la refresquera Coca-Cola. El diseño de su logotipo se reconoce de inmediato, el nombre está escrito en cualquier país y la encuentras en cualquier rincón del mundo. Es una marca fiel a sus consumidores y les ofrece lo que buscan, es por ello que existe una gran variación de productos.

En ese sentido, ahora presenta un nueva versión llamado Coca-Cola Life, lanzada en Argentina, que está endulzado con Stevia, un nuevo ingrediente que ha reducido a la mitad las calorías de la presentación tradicional. El diseño de la lata es de color verde con letras blancas, igual que la taparrosca y la etiqueta de las botellas, un color que jamás se había empleado en el diseño de su empaque. Sin importar el color de su etiqueta, esta marca se reconoce a primera vista por la forma de su botella y su tipografía.

Foto por: Sebastian Bassi en Flickr

La marca Ponds, también experimenta con el color de sus empaques. Su línea de cremas faciales utiliza la misma forma de empaque, pero cada una se identifica con distinto color. Los consumidores de estos productos ya están familiarizados con la imagen de marca, por ello, con sólo ver su empaque y logotipo, reconocen y confían en la calidad del producto. Es así como estas marcas, que ya están posicionadas en la mente de los consumidores, se permiten utilizar diferentes colores y presentaciones de sus productos.

Por: Daniela C. Villa