Si algo ha caracterizado a los anuncios publicitarios para televisión de infinidad de marcas de electrodomésticos, limpiadores y otros productos para el hogar a lo largo de la historia, es el hecho de que quienes protagonizan estos mensajes suelen ser mujeres, quienes en representación de madres, amas de casa o esposas, han aparecido como las únicas responsables de las tareas de mantenimiento de la casa. El hecho, sobra decirlo, ha resultado por décadas sumamente machista e inequitativo y aquí puedes observar ejemplos clásicos.
Por eso ha llamado la atención el mensaje publicitario que, con motivo del Día internacional de la mujer, ha producido y publicado la marca de limpiadores Alen, que comercializa productos como Pinol o Cloralex. En él es posible observar una sátira que propone la comercialización de limpiadores de uso exclusivo para varones.
https://www.youtube.com/watch?v=XVkxOjXFXEw
Con un lenguaje dinámico y efectos visuales llamativos, se sugiere que han surgido estos productos ideales para que los hombres puedan dedicar tiempo a las labores domésticas, sólo para descubrir, al final del anuncio, que realmente poseen los los mismos componentes que los productos originales.
Y es que, según se propone en esta pauta publicitaria que seguramente llega muchas décadas después de lo que debía al circuito de los mensajes de promoción, las labores domésticas deben ser ejecutadas por todos sin importar su género ni condición.
Si bien la marca Alen ya había publicado hace algún tiempo una campaña en la que un varón -el actor mexicano Jaime Camil- era el encargado de este tipo de acciones de limpieza, lo cierto es que el mensaje por la igualdad en las tareas del hogar no había sido tan claro ni contundente como el reciente anuncio lanzado por la marca.
El mensaje llama poderosamente la atención debido a los muchos años en los que se acostumbró que la limpieza y demás labores de casas eran exclusivamente de la incumbencia de las mujeres y sin duda aporta planteamientos importantes para ir en la búsqueda de condiciones más justas para todas las personas que comparten responsabilidades tan cotidianas como la higiene doméstica. ¿Qué opinas?