En este último mes gané el pitch para diseñar un menú de la temporada de una cadena restaurantera. Llevaba más de medio año perseverando por esa cuenta. Se hicieron propuestas, las cuales agradaron y otras no. Desde medios masivos, pasando por out of home, rich media y redes sociales. Cada idea consternaba puntos sumamente atractivos para el beneficio del cliente. Esas que agradaron fue tanta la demora de toma de decisiones por parte de los dueños que cuando se quiso implementar la campaña yá era demasiado tarde. Así que se tuvo que empezar de cero. Como si fuera un largometraje de cine independiente no bien logrado por su demasía en la lentitud de la historia. Entonces ¿Para que sirve diseñar grandes ideas cuando al final del día se hace lo que todos hacen? Lo olvidaba. Los clientes pueden ser borregos. Pues bueno, ese es nuestro trabajo. Educar, convencer, persuadir, informar y quitar esos tabúes.

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El diseño es una herramienta básica para lograr la intimación de la idea. ¿Qué es la intimación? Pongámoslo así: es el momento exacto, donde tu corazón empezó a latir más rápido de lo normal, al igual que tu estomago como cuando te enamoras. Si no te has enamorado no te puedo ayudar. No me imagino Beavis sin un Butthead o un vino de uva carménère sin un exquisito y suculento corte de carne. Así es el diseño con relación al marketing y publicidad.
Ey, pero no hablo de diseño gráfico, ni de diseño de interiores o de arquitectura, o diseño industrial. Hablo del diseño en toda la extensión de la palabra. Le guste a quien le guste y le cueste a quien le cueste nuestro cerebro diseña desde como nos vamos a vestir en la mañana. Diseño de ruta para nuestras oficinas o con nuestros clientes o bien diseño a casa cuando a penas vas saliendo del antro.

Imaginémonos un pueblo donde la avenida principal es un lago que lleva más de 53 años, 9 meses y 2 ½ seco. La tienda de la esquina es el Costco del pueblo. La casa de Doña Mary es el cine porqué tiene una “nueva” pantalla de plasma. El transporte, son los tenis de preferencia. ¿Qué tan importante es tener variables en nuestras vidas para diseñar? En un mundo pequeño la creatividad es demasiado limitada y me atrevería a pensar que es nula, yá que todo es al son de la monotonía y cotidianidad. Ver los mismos programas televisivos a la misma hora. Ver a la misma gente todos los días.

La construcción de vialidades no las debemos de ver como “mmmm ta….otra vez se van a tardar como un año y voy a llegar bien tarde todos los días” Mi estimada/o lector/a tu persona automáticamente está entrando en una etapa de conformismo y capricho en lugar de buscar variables a los costados, inferiores o superiores. ¿Miedo al fracaso o miedo al intentarlo? La Dirección estratégica que puedas diseñar tiene que imitar la fluidez de la sangre por las venas y no solamente de un camino principal. Para explicarme mejor esa estrategia que conlleva una dirección deseada o predeterminada es tan fácil como trazar dos puntos en la posición que desees. Depende de ti si vas en línea recta, pero no siempre es la más fácil, ni tampoco la más rápida y mucho menos la más importante. Sería lo obvio de lo lógico hacer un trazo en línea recta para unir esos puntos, pero si te aseguro que será mucho muy aburrido. ¿Por qué no diseñas algo nuevo? ¿Por qué no tomas otras variables?

¿Entonces cuál es la diferencia de planear y diseñar? Con un diseño previo mal ejecutado, aún con el mejor diseñador de la actualidad no podrá categorizar los conceptos, objetivos e ideas para una meta propia o comunal. Créetela desde ahora que cuentas con un diseñador interno sin haber estudiado la carrera. Las decisiones están siempre ahí, la diferencia es que dependiendo de tu estado de ánimo es como haces la selección adecuada o errónea. O si bien prefieres….hay siempre alguien que quiere aportar eso que estás pensando. Provoca que tu diseño sea como un trébol vial, por lo tanto que tu proyecto se convierta en una Clover Brand. Y deja de pensar horizontal o verticalmente.

Karl Reich
Fui concebido en 1981, nacido a principios de 1982. Soy de una generación que al nacer no existía el internet, pero si Siempre en Domingo. No era bizarro pedir ‘aventón’ y eso que soy de Chihuahua. Me apasiona el arte de aprender y desaprender paradigmas y romperlas. Busco inspiración en lo sensible de la naturaleza y lo sorprendente de lograr lo imposible en posible. Soy fan de la flexibilidad de la adaptación en mi vocación y persona. Adoro el buscar un espacio y en cualquier oportunidad colocar sobre la espalda una mochila e irme para buscar esa inspiración.