El fotografiar platos de comida se está convirtiendo en una moda que inunda las redes sociales, y es que la cocina, más que nunca, está en boca de todos gracias, en gran parte, al auge de programas culinarios tipo “Masterchef” que han hecho que cada vez sean más los apasionados por los fogones. Además, cuando uno va a comer es normal el hacer fotografías de los platos que vamos a comer. Para que hagas fotos de comida con un diseño espectacular; a continuación, te mostramos diez consejos que no puedes pasar por alto.
1.- Evita el uso de flash directo, ya que produce unos brillos excesivos y los resultados no suelen ser muy agradables.
2.- En la fotografía de comida, el aspecto más importante es la iluminación, así que tendrás que ver, analizar el entorno y buscar la fuente de luz más idónea. Sin duda alguna, la luz perfecta es la natural (aunque siempre y cuando sea suficiente), aunque no está de más el apoyarla con luz auxiliar, para ello, lo mejor que puedes usar son reflectores (como una cartulina blanca) o algún flash indirecto.
3.- A la hora de fotografiar comida, lo ideal es potenciar, al máximo, las texturas. Para ello, la luz no debe ser excesiva.
4.- Si vas a fotografiar ingredientes translúcidos, como, por ejemplo, hojas de verduras, lo perfecto será el utilizar una suave fuente de luz desde atrás.
5.- Para hacer fotografías de alimentos, siempre utiliza trípode, ya que, de esta forma, evitarás movimientos indeseados en las tomas. Además, otro truco es intentar mantener la cámara entre unos 10 y 45 grados por encima del plato o del motivo.
6.- El fondo es también muy importante, por lo que hay que cuidarlo al máximo. Así, lo mejor será preparar un bodegón sencillo de fondo, aunque, eso sí, sin que reste interés al motivo principal del plato.
7.- En cuanto a los objetivos a usar, puedes probar diferentes opciones. Un teleobjetivo con una abertura de diafragma mínima para lograr que quede enfocado todo el motivo; o, por otra parte, un angular con una abertura grande y controlando, así, la profundidad de campo.
8.- Cuando vayas a fotografiar comida, hay que medir muy bien el balance de blancos, para así lograr una temperatura de color adecuada y resaltar, de esta forma, los colores.
9.- Y para resaltar algunos platos, se puede hacer uso de trucos estéticos que hagan embellecer aún más el plato. Por ejemplo, pulveriza con aceite una ensalada o glicerina sobre la fruta para así aportar frescura.
10.- Por último, no hay que olvidarse del procesado, ya que, de esta forma, se puede mejorar la saturación de colores, el equilibrio de sombras y luces, así como eliminar algún brillo indeseado.
A continuación, te mostramos algunas fotografías de platos hechas con algunos de estos trucos, para que puedas hacer la foto perfecta de un plato.
