No importa en donde vivamos y que hagamos. En estos días queremos todo a la voz de YA. Libros y teorías han demostrado que el consumidor no sabe lo que quiere. Entonces ¿por qué han emergido empresas sumamente exitosas? Los dueños que antes jamás habían pensad en ser millonarios. Ahora, sin querer queriendo lo son. La antítesis puede ser que ellos mismo odiaban o siguen odiando al capitalismo, pero ese odio es enclaustrado en el closet hasta no salir por lo menos un unos buenos años. Todo esto tiene un punto y llegaré a ello.

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Es verdad, nosotros no sabemos que queremos hasta que lo tenemos enfrente. Comodidades, facilitadores de saciar nuestra pereza o estilo de vida que siguen y continúan creando y diseñando sistemas que rompen con los paradigmas de una constitución escrita por empresarios a finales del siglo XVIII o inicios del siglo XIX. Es simple el modelo de negocio “Hacer lo que la sociedad necesita”. Vuelvo a lo mismo ¿qué necesita?

Estos modelos de negocios fueron diseñados para romper un simple y sencillo aspecto. La cotidianidad. Sin embargo no están descubriendo el hilo negro, pero si innovándolo. Nos encontramos en un año en donde se vale hacer intercambio de ideas. Vas a ganar más valor para tu negocio compartiéndolas que guardándotelas para ti mismo. Si dices que tienes una buena idea, pero te falta el dinero o el socio. Lamento decirte que entonces no es una buena idea y ya alguien la está ejecutando.

Es importante, pero muy importante que el diseño sea ejecutado con motivos de exclusividad y de personalización; mejor aún que ni si quiera te tengas que mover unos cuantos kilómetros. Cuando tú le das el poder y el valor que se merece tu cliente, va a amar tu marca. Aunque tu vecino tenga el mismo producto, pero amas a tu producto por cosas distintas a las que tu vecino encontró con suma prioridad.

Ahora la pregunta ya no es que necesitas, sino que necesitarías. Nacida por una utopía, pasando por la selva realista y aterrizando en el desierto crítico. Dentro de los dos universos en los que vivimos, el real y el virtual. Dos mundos, tantos siglos, SIN coincidir. El mercado real (rustico) es más escéptico y el virtual (fantasioso y aventurero) demanda más la importancia de su tiempo. Por eso si vas a lanzar una
e-brand ten por seguro que tu mercado no serán los Baby Boomers.

¿Cómo mezclar un interés de varias generaciones con un solo producto? Un solo producto diferentes compradores de todas las edades. Es como leer un periódico digital con contenidos que tu escogiste leer. A grande escala yá existe. Pero a una escala de un menor nivel es algo enriquecedor e innovador. Vivimos y creemos que tu anuncio se va a ver mejor en una revista física, cuando el Media Kit te cuenta mentiras en el tiraje, Pass Along , retorno y demás. Queremos hacer crecer nuestros negocios pero un simple anuncio en una revista donde nadie te va a pelar.

En cambio si este anuncio lo hipersegmentas en contenidos donde realmente te van a leer. Por lo menos tendrás impacto y el costo por millar se te va a ser más económico. Sugiero que no nos equivoquemos en lo que es mejor para el negocio y lo que es para mi porque cuando quieres hacer crecer tu negocio, pero al mismo tiempo no tienes capital o te haces el pobre, bueno entonces ahí me estás diciendo lo que mejor quiere para ti como persona.

Crecer no es gratis. Si no quieres formar alianzas, demostrar tu vocación, ni ser líder en tu campo. Sigue como hasta ahorita porque por muy religioso que seas…tus dioses jamás bajarán a ayudarte. La ayuda ya la tienes, pero no la quieres ver.

Karl Reich
Fui concebido en 1981, nacido a principios de 1982. Soy de una generación que al nacer no existía el internet, pero si Siempre en Domingo. No era bizarro pedir ‘aventón’ y eso que soy de Chihuahua. Me apasiona el arte de aprender y desaprender paradigmas y romperlas. Busco inspiración en lo sensible de la naturaleza y lo sorprendente de lograr lo imposible en posible. Soy fan de la flexibilidad de la adaptación en mi vocación y persona. Adoro el buscar un espacio y en cualquier oportunidad colocar sobre la espalda una mochila e irme para buscar esa inspiración.