La identidad visual de una marca, empresa, institución o personaje no se debe tomar a la ligera y, si bien hay muchas cosas que puedes hacer y aplicar con el poder de tu imaginación, existen acciones que nunca debes realizar, a continuación te recordamos cinco de ellas.

No diseñar con un brief
Resulta fundamental tener referencias e indicaciones de lo que pide un cliente, de lo contrario no se podrá realizar una correcta identidad de marca y cuando llegue la hora de presentar el resultado será un desastre.

No diseñes para ti
Hay que dejar de pensar en los gustos propios, piensa en las especificaciones del brief, porque al  dejarte llevar por tendencias que a ti te gustan corres el riesgo de que el logo no represente la identidad de marca que el cliente busca, y tu jefe no quedará nada contento.

No tener un diferenciador de marca
Uno de los puntos más importantes es saber cuál es el diferenciador de la marca, porque de lo contrario a la hora de diseñar no sabrás los puntos fuertes que debes plasmar en el logo, es importante que el cliente hable de todas las características de la nueva empresa.

No hacer suficiente investigación
Una vez que quedaron claros los diferenciadores de la marca debes realizar un investigación profunda, porque algunas ideas que pueden parecerse a las tuyas, corres el riesgo de caer en el diseño de algo ya muy visto, te recomiendo hacer varios bocetos.

No ser capaz de explicar el diseño
Una vez que realizaste el diseño debes de ser capaz de explicar los significados de cada elemento, por que es importante que el cliente sepa que diseñaste en función de la identidad y valores de la marca, eso facilitará promocionar el producto.

Recomendaciones extras
Como recomendaciones extras se debe adaptar el diseño a la web responsive, porque es importante tener una clara presencia del elemento en todas la pantallas en las que se presente en un futuro, hay que pensar en los colores corporativos y los colores del elemento, es importante diseñar en torno a eso también.

Kevin Cantrell Studio Logos