Aunque la historia de la aplicación de mensajería más usada nos parezca relativamente “nueva”, en realidad tiene una trayectoria de 10 años, en la cual el logo de WhatsApp se conservo desde el inicio hasta la actualidad.
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Todo comenzó cuando Brian Acton y Jan Koum, quienes eran trabajadores de Yahoo! antes de empezar el proyecto, decidieron unirse para fundar la compañía. En 2009 Kuom compró un iPhone y se percató del mercado disponible en el mundo de las aplicaciones, por lo que le planteó a Acton una plataforma con la que los usuarios pudieran interactuar, así como interactuar con sus amigos, familiares y contactos comerciales.
Una de las principales ideas del proyecto, era que los usuarios pudieran ver si la persona estaba conectada, si estaba disponible (con los primeros estados) o si el mensaje había sido recibido. Por ello jugaron con los términos “What’s Up” (¿qué pasa? o ¿qué onda? en inglés) y “App” como abreviatura de application; de ahí surgió el nombre de “WhatsApp”.
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El logotipo fue creado desde el inicio de la aplicación, pero no se sabe sobre el diseñador oficial, por lo que se piensa fue realizado por los mismos Brian Acton y Jan Koum. Aunque esta versión es la más aceptada, también existe la posibilidad de que fuera pedido a un profesional externo a la compañía.
Aunque el logo WhatsApp pareciera muy evidente y sencillo, tiene unos detalles que ocultan significados, pero en general es un emblema muy significativo y recordable, lo que le ha valido para mantenerse intacto durante tantos años.
El emblema está constituido por dos elementos; el primero es una burbuja de texto, mismas que se utilizan dentro de la aplicación y que tienen un sentido: si la pequeña “cola” apunta a la derecha se trata de un mensaje “saliente” o que se envía, pero si ésta apunta a la izquierda hace referencia a un texto “entrante” o que se recibió.
Por lo tanto que el ícono apunte a la izquierda significa que la aplicación siempre recibe los mensajes y siempre está en comunicación; también es una manera de simbolizar las notificaciones, tan novedosas en aquella época. Dentro del globo de texto se encuentra el segundo elemento, un teléfono que representa la otra función de la aplicación, las llamadas.
Gracias a ese significado simple, que en conclusión podríamos hablar de que el logotipo refleja una actividad: la comunicación (mediante texto o llamadas), es que permaneció intacto, aunque con unas pequeñas modificaciones de degradados, posición y fondo.
Otro elemento significativo de WhatsApp es el color verde utilizado (#25D366 o R: 37, G: 211, B: 102) el cuál es muy similar a la aplicación de teléfono nativa del iPhone, capta la atención fácilmente y destaca contra los azules tan utilizados en redes sociales.
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