Como en cualquier otra profesión, el éxito en la creatividad visual depende también de unas finanzas personales sanas. Ahora que 2020 sigue siendo muy joven, puedes plantearte mejorar este aspecto de tu vida profesional.

Sigue las cinco recomendaciones que se enumeran a continuación, son tan obvias como infalibles, aunque a veces pueda suceder que las olvides.

Aprende a distinguir entre tus sueños y tus objetivos. Si soñar no cuesta nada, cumplir metas concretas sí que requiere un esfuerzo constante, plantearse objetivos y desarrollar estrategias para lograrlos en tiempo y forma. Esto implica ser realista y tomar decisiones que se relacionan con el dinero de manera directa.

Ten control de tus gastos todo el tiempo. Es necesario que sepas con claridad en qué estás gastando tu dinero, de lo contrario, no sabrás cómo reducir tus gastos ni en qué rubros hacer los ajustes necesarios. Aprovecha diferentes herramientas digitales que te pueden ayudar a lograrlo.

No uses créditos si no los necesitas. Recuerda que los créditos no son sinónimo de liquidez financiera a tu disposición, sino una posibilidad de endeudarte en caso de que sea absolutamente necesario. Si ya estás obligado a pagar uno, es mejor que lo hagas en tiempo y forma para evitar recargos.

Evita la compulsión en tus gastos. Toma conciencia de aquello que realmente necesitas y aquello que no. En el caso de la creatividad visual, puedes pensar en insumos y elementos que ayudan a potenciar tus talentos. Pero respira, reflexiona y determina con toda honestidad qué es lo puede comprar y lo que no.

¡Ahorra! El elemento sustancial de una buenas finanzas personales es la buena capacidad de ahorrar. Acostúmbrate a ello para que posteriormente puedas hacer crecer tu capital con inversiones y reinversiones. Sólo el ahorro hará posible que sovrevivas a los tiempos difíciles, sobre todo cuando eres tu propio jefe o si quieres emprender.