Ni la piñata, ni el Nacimiento ni los buñuelos: si existe un icono representativo de la Navidad que surgió en México esa es la flor de Nochebuena, específicamente en Taxco de Alarcón, pueblo que se localiza al norte del estado de Guerrero, a unas dos horas de la Ciudad de México… o al menos ahí se registró el hecho que marcó su internacionalización.

Durante el siglo XIX, un embajador de los Estados Unidos en México que además era un especialista en botánica, Joel Roberts Poinsett, descubrió, durante una visita al pueblo minero de Taxco, esta flor que los mexicas llamaban cuetlaxochitl, o flor de invierno.

En honor a este político originario de los Estados Unidos, en su país nombraron a la planta como poinsettia, pero su nombre científico es en realidad Euphorbia pulcherrima. Fue Poinsett quien mostró al mundo la flor de Nochebuena, pero durante la época colonial su uso se había geeralizado ya a todo el mundo

Fue durante aquella época cuando visitó el área del sur de México llamada Taxco de Alarcón y entró en contacto con la flor de nochebuena o flor de navidad, más tarde llamada en los Estados Unidos como poinsettia. Los aztecas se referían a esta planta que florecía en invierno como cuetlaxochitl, su nombre científico es Euphorbia pulcherrima.

Con los años, esta flor se integró al diseño gráfico y a la ilustración para formar parte como uno de los más importantes símbolos de la Navidad no sólo en esta región del país, sino en todo el mundo.

NOCHECBUENA

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