La sucursal más reciente de la marca de hamburguesas en el estado de Querétaro, en México, tomó sólo ocho horas para ser armada y diez días para abrir sus puertas a los comensales, el secreto es el material que utilizaron, ya que en vez de construirse de la manera convencional se usaron paneles prearmables.

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Es la primera ocasión que en México se utiliza una técnica como estas, que además, es sustentable. Asimismo, también es la primera edificación modular sustentable en toda América Latina, pero no el único, ya que se planean seis o siete proyectos que planea construir la firma en un año con esta tecnología, dijo Francisco Demesa, director de Burger King México.

Este restaurante, que abrió al público el pasado mes de septiembre tiene un área de 134 metros cuadrados, con una capacidad de 46 comensales al mismo tiempo. De acuerdo con los arquitectos responsables del proyecto, el exterior está armado con paneles modulares de insulpanel, placas de polietileno expandido forradas con láminas de acero, los interiores de tabla-roca delgada espesor y el armado es de acero. Lo paneles son sustituibles y a prueban de grietas.

En cuanto al peso total del restaurante Burger King es de 80 toneladas, 20 toneladas por módulo. No es la primera vez que la empresa lanza construcciones de este tipo pues, en Europa ya ha trabajado en estos restaurantes modulares sustentables.

La construcción está diseñada para expandirse de forma horizontal y hacia arriba, y es resistente a temblores y huracanes. Vale señalar que el lapso de vida útil de este tipo de construcciones va de 50 años en adelante, dependiendo del mantenimiento.

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