En el diseño web estriban dos necesidades fundamentales: el estético y el funcional. Ambos aspectos necesitan tener un equilibrio bien ponderado si lo que se desea es que el tráfico y permanencia por parte de los usuarios sean los esperados.

Entre otras necesidades básicas, un buen diseño de sitio web debe ser adaptativo (o responsive), tener un tiempo de respuesta óptimo, una interfaz los suficientemente intuitiva, un motor de búsqueda efectivo, etcétera… todo ello debe prever una inversión adecuada y no escatimar en recursos, sobre todo en un primera etapa.

De regreso a lo visual, es necesario que el diseño, selección de colores, tipografía e imágenes se centren en el tipo de usuario que ha de acceder al portal web, ya sea que se trate de un blog, de una tienda en línea u cualquier otro tipo de portal.

Tu misión como creativo visual web es convencer, con argumentos sólidos, acerca de la necesidad de una inversión importante que en el futuro no traiga problemas, recuérdale que lo barato sale caro y más vale hacer uuna inversión importante como primer paso.

Por último, la cercanía con el cliente, la comunicación permanente y la revisión de avances y cada paso realizado permitirá que la inversión del cliente funcione mejor y no exista desperdicio, sobre todo si se toma en cuenta que la cercanía permitirá la corrección de problemas desde etapas tempranas