Hasta hace unas horas, la carta suicida de Kurt Cobain, estampada en playeras, se podía adquirir a través de eBay por un costo de 25 dólares. Este diseño fue lanzado al mercado sin la autorización de ningún apoderado legal de la imagen del extinto rockero.
Notas relacionadas:
25 campañas gráficas censuradas
¿Cómo lucirían leyendas de la música si siguieran con vida?
¿Copia o inspiración? 12 casos obvios de plagio
Las críticas, sobre todo de los fan del vocalista de Nirvana, no se hicieron esperar y tuvo que suspenderse la venta de las prendas. No es la primera ocasión que, en nombre de la moda, se recurre a imágenes y símbolos de arraigo popular.
Hace unos meses, cuando durante la presentación de la banda Calle 13 en el Palacio de los Deportes de la Ciudad de México, la tienda de esta sala de conciertos puso a la venta playeras idénticas a la que el vocalista de la agrupación, Residente, portó, con la leyenda Ayotzinipa: faltan 43, durante la entrega de los Latin Grammy.
Hace algunos años la marca de jeans Furor decidió lanzar su línea Habana, en la que la célebre efigie de Ernesto “Ché” Guevara, retratado por de fotógrafo Alberto Korda, aparecía estampada en las prendas de la colección.
Otros líderes sociales o figuras de la cultura popular han aparecido en prendas que se pueden adquirir con mucha facilidad… sin autorización.
