Indudablemente las marcas buscan un lugar en la mente del consumidor, existen marcas que desean abarcar más segmentos de mercado sin perder su presencia en el mercado.
El diseñador muchas veces tiene la encomienda de crear un empaque que mantenga la imagen del producto estrella y al mismo tiempo identifique al nuevo segmento al que se quiere llegar.
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Una tarea verdaderamente retadora para los diseñadores, ya que debe enamorar y convencer a un mercado con un producto distinto al que la marca iba dirigido en un principio, manteniendo la esencia de esta que muchas veces habla de calidad y/o prestigio.
En el diseño de las transformaciones se encuentra el empaque, que lleva determinada tipografía, colores adecuados y forma.
La composición total del empaque debe transmitir esa personalidad y estilo que se busca para interactuar con el segmento meta.
El empaque es la presentación física y directa con el mercado en punto venta (lugar dónde la mayoría de las veces se toma la decisión de compra), es por eso que el diseño de empaque es tan importante.
Coca-Cola es un ejemplo claro, Argentina lanzo un nuevo producto, debido a la tendencia en el cuidado de la salud “coca-Cola life“, en el cuál se trabajó una campaña que incluía el diseño de su nuevo empaque que recordaría sus beneficios (mejor calidad de vida y ambientalista) y atributos (baja en calorías y envase reciclable).
La Coca-Cola Life logró penetrar en el mercado preocupado por la salud.
El empaque verde fue diseñado como una forma visual de decir “un toque natural”
Kellog´s es otra de las marcas que después de estar posicionada sólo como un producto de nutrición infantil, logró introducirse en el segmento de mujeres que cuidan su salud, con el diseño de su empaque y logotipo que identifican su personalidad y estilo de vida:
