En muchas ocasiones el color blanco de las paredes de los hospitales suele ser deprimente, pero esto cambiará, al menos en un nosocomio de Londres, en donde se exhibirá un mural de Bridget Riley.
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A Riley le fue encomendado hacer un mural de 56 metros en piso 10 del Hospital de Saint Mary en Paddington y es el primer mural en 27 años para la artista inglesa.
De acuerdo con el diario The Guardian, el objetivo del mural es para levantar el ánimo de los pacientes que se encuentran en el nosocomio.
La obra de Riley está compuesta por franjas rítmicas y de colores vivos pintados directamente en los muros del hospital y busca transformar la experiencia no sólo de los enfermos, sino también de sus visitantes y del personal.
Riley es una figura destacada dentro del movimiento artístico del Op Art, y que creó complejas configuraciones de formas abstractas diseñadas para producir efectos ópticos llamativos.
Imágenes tomadas del Twitter y Facebook de Imperial College Healthcare Charity.
