Los diseños colocados en los espacios publicitarios en el interior de los vagones del metro se caracterizan por ser coloridos, un tanto saturados, llenos de información, de baja calidad estética y con imágenes poco atractivas, en general la mayoría son feos y poco cuidados.

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Para terminar con ese estereotipo en los diseños aplicados en los banners dentro del metro, la estudiante de diseño se embarcó en una creativa y activa tarea para eliminar de alguna manera cierta parte de estos anuncios y dejar en claro que son diseños pocos atractivos.

Se trata de la diseñadora en proceso Hyo Hong, quien capturó de forma documental su proceso de rechazo a estos anuncios a través de un método gráfico que va acorde al diseño contemporáneo sin perder el enfoque del mercado y el mensaje a transmitir.

Esto sucedió en el metro de la ciudad de New York con el fin de limpiar los defectos a la vista dentro de los vagones, aunque para algunos son una parte cotidiana de risa de la vida y un atractivo turístico, el objetivo de la propuesta es interesante y original.

El principal anuncio en combatir es el de un médico dermatólogo que muestra el antes y después de sus consultas, pero satura de publicidad estos espacios y arruina todo el paisaje de viajar en metro por sus diseños mal hechos de publicidad. Al contrario, la diseñadora coloca sobre la mitad de cada anuncio una idea fresca, limpia y agrada a la vista. Se agradece la propuesta, tal que debería realizarse tanto en México, donde ocurre lo mismo con los diseños, como en otras partes del mundo.

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