El escaparate esencial de tu actividad creativa se compone esencialmente por el portafolios, ese documento que presenta, a través de diferentes formatos y estilos, los más importantes ejemplos de tu trayectoria visual. Como resulta evidente, el portafolios es por sí mismo un producto del diseño.
Para que este documento protagónico de tu actividad tenga buenos alcances existen recomendaciones mínimas que puedes seguir. Toma nota de los cinco consejos que a continuación se enumeran y proyecta tu propia trayectoria y las de los demás con imaginación y mucho diseño.
1. Inserta lo más adecuado y no más
Cada piezas que insertes en el portafolios debe describir lo mejor de tu trabajo y mostrar una adecuada calidad mínima de imagen, así como poseer una descripción correcta, clara y completa de cada proyecto.
2. Cuida permanentemente el formato
El formato con que decidas presentar el portafolios es fundamental y su correcta selección depende de la plataforma digital que decidas utilizar. De ser posible, apóyate en la tecnología para animar un poco tu perfil.
3. Haz que el portafolios cuente tu historia
El portafolios es el respaldo de tu historia creativa y profesional, en la medida en que sepas contarla de la manera más creativa, concisa y original, puedes resultar más atractivo ante los ojos del cliente y los espectadores de tu trabajo.
4. Mantén siempre actualizado el portafolios
Así como un portafolios describe tu historia, necesita colocar siempre en el lugar más importante el estatus creativo en que te encuentras -siempre que se trate de un un buen momento, desde luego- y describir el proyecto en que estás trabajando.
Triple Portfolio, por Matías Echavarría
5. Confía en tu trabajo
Como decíamos, el portafolio muestra tu esencia y lo mejor de ti. Si tienes confianza en tu trabajo y tus alcances, ello se verá reflejado en tu portafolios. Pregúntate si logras este cometido al momento de concluir la elaboración o actualización de tu portafolios.
Diseño de Portafolios, por Paola Rodriguez
