El arquitecto mexicano Félix Blanco, quien se ha especializado en desarrollar proyectos habitacionales de gran lujo, plantea el concepto de arquitectura en 360 grados, que consiste que ofrecer al cliente una oferta integral que va desde la concepción inicial del proyecto, su viabilidad, desarrollo, construcción y adecuación para ser habitada en su totalidad.
Es como elaborar trajes a la medida del cliente, que en este caso serán los usuarios finales de la vivienda y a decir Félix, “tendrán toda una vida para darse cuenta si el proyecto que se le ofreció se hizo bien”.
Arquitectura de 360 grados significa tener la capacidad de entregarse por completo a un proyecto y establecer una comunicación completa con el cliente para entender sus necesidades. Para ello es necesario observar los hábitos de quienes ocuparían la vivienda, entender cuáles son sus necesidades de espacio, de ergonomía, de iluminación y consumo energético, entre otros detalles.
A decir de Félix, “se trata de hacer una labor casi de psicólogo con el cliente, establecer la comunicación adecuada y cumplir con nuestra misión, que consiste en hacer sus sueños realidad”.
Dentro de este este concepto de servicio integral, un proyecto de arquitectura 360 implica también la generación de ambientes propicios para que se desarrollen las actividades cotidianas dentro de un espacio.
Para lograr cumplir adecuadamente con las exigencias de sus clientes, Félix Blanco ha ponderado entre cuatro variables y las ha colocado en el siguiente orden:
– Calidad,
– Servicio,
– Tiempo
– Costo.
Blanco considera que la calidad es ineludible porque “el cliente tiene toda una vida para darse cuenta si como arquitecto le hiciste trama, es él quien la va a habitar”. El servicio resulta inherente a la calidad del producto y el tiempo depende de las necesidades específicas del cliente cuando a su vez las necesidades determinan el costo de todo proyecto de arquitectura.
Mira algunos ejemplos de los proyectos que Félix Blanco ha podido desarrollar.
