Por considerar que se trata de un elemento visual que ha sido “profanado para convertirse en una señal del pecado homosexual”, un grupo cristiano pretende patentar la imagen del arcoíris, que ha sido acogida por las causas de la diversidad sexual.
Linda Harvey, fundadora del grupo cristiano Mission America de Estados Unidos ha anunciado que buscarán obtener los derechos de este elemento visual. Sabiendo que difícilmente logrará su cometido, se ha dedicado a declarar que, en todo caso, la comunidad LGBT debería adoptar otro arcoíris apropiado, “con colores como el café, malva, gris y negro. Mucho mucho negro. Deprimente, aburrida, vacía, no conduce a ninguna parte. La bandera de Satanas.”
Ciertamente estos segundos colores irían muy bien para atuendos y no tendrían que ser aburridos, pero el asunto apunta hacia cosa, se refiere más bien a la alta intolerancia que aparentemente caracteriza a un amplio sector de las personas que ejercen la religión cristiana y algunas otras formas de la fe. ¿Qué opinión te merece este acto?
Con información de Homosensual