En medio de las obras de restauración de la plancha de la plaza de la Constitución de la Ciudad México ha emergido la construcción que le dio a este sitio el nombre con el que popularmente se le conoce: el Zócalo.
En otra ocasión tuvimos oportunidad de contarte que la Plaza de la Constitución de la CDMX ostenta de manera popular el nombre de Zócalo por el basamento circular que fue colocado ahí durante el gobierno de Antonio López de Santa Anna, hacia el año de 1843, para colocar un monumento que celebrara la Independencia mexicana.
En dicha construcción jamás fue colocado el monumento y el zócalo permaneció en la plaza por muchos años hasta que fue cubierta por el concreto que caracterizó a la plaza que sería bautizada oficialmente como de la Constitución, pero que popularmente adoptó el mote de Zócalo.
Con los trabajos de restauración de la principal plaza pública de la capital mexicana fue develado este basamento original que hace pensar en el pasado arquitectónico de la ciudad, las múltiples caras y la evolución que con el paso de los años, décadas y siglos ha sufrido para adaptarse a ciertas necesidades urbanas específicas.
Es el propio Instituto Nacional de Antropoligía e Historia, instancia oficial del gobierno mexicano que supervisa estas obras de remodelación, quien ha divulgado algunas de las imágenes que muestran el basamento que no hace imaginar los tiempos que corrían hace alrededor de 150 años.
Imágenes: INAH y Paredro
