El concepto de sustentabilidad en la arquitectura ha dado origen a un nuevo movimiento, nos referimos al Tiny House, que básicamente se trata de construcciones en espacios pequeños y más baratos.
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Este movimiento social busca reducir en gran medida el espacio construido en el que viven las personas. Ejemplo de ello es que en promedio las casa de Estados Unidos abarcan cerca de 240 metros cuadrados, mientras que las casas bajo este movimiento pretenden que no sobrepase de los 50 metros una construcción.
La reducción del espacio no sólo es por moda, sino porque propone una mayor flexibilidad en la forma de vivir y esto se reflejará en una vida más sencilla y abierta al espacio público.
Esta tendencia traería otros beneficios, pues una casa grande implica mayores costos de construcción, así como más impuestos, mayor gasto en calefacción.
Sin embargo, el concepto podría no ser el adecuado para todas las sociedades, ya que aunque traería beneficios económicos, es probable que las personas no acepten dejar sus aspiraciones de tener comodidad al contar con más espacio.
Tiny House también está dirigido a aquellas personas que no quieren estar ancladas a un sólo lugar, es decir, permite la movilidad de las casas.
También invita a no contar con tantos muebles o bien contar con muebles multifuncionales y la optimización de espacios verticales. Todo lo anterior significan grandes ahorros, pero es probable que la gente no acepte ceder ante la falta de comodidad.
Fotos de tomadas de viVood
