Para que la fuente de tipografía seleccionada durante el diseño de un logotipo tenga coherencia y armonía existen tres detalles que debes cuidar.

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Cuando se trabaja en el diseño de un logotipo es frecuente encontrar dificultades al momento de hacer la selección tipográfica que complementará el isotipo que de seguro ya se ha elaborado.

Para tener éxito en esta misión es importante que descubras tres códigos que contiene el isotipo ya creado. Una vez que ubiques estos puntos podrás continuar con el proceso de diagramación, detallado de la fuente, ajustes de kerning y todo el proceso creativo que representa la elaboración y conclusión del logotipo. Los tres elementos a revisar los enumeramos a continuación.

1.- Mayúsculas y minúsculas
El isotipo debe tener concordancia en su forma con la posibilidad de utilizar letras altas o bajas en el logotipo.

2.- Tipografía serif o sans serif
Contenga o no serifas, la tipografía tiene que adaptarse a la imagen ya creada y a partir de ello estilizarse de la manera adecuada.

3.- Punto sobre la i, ya sea circular o cuadrado
Este aspecto debe tener concordancia con el isotipo y puede formar parte de la estilización misma de la fuente en el caso de que la fuente original haga o no uso de una forma redonda o cuadrada.

 

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Fuente: Larva Graphics