En un barrio marginal de México la creación de un mural gigante dio lugar a un ambiente más adecuado para la recomposición del tejido social.

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Un proyecto creativo auspiciado por el gobierno Municipal de Pachuca, en el estado mexicano de Hidalgo, pintó 209 fachadas del barrio de Palmitas, el cual se ubica en un cerro de la ciudad. El resultado es una monumental obra de arte de unos 20 mil metros cuadrados que despliega color sobre una base blanca. El grupo de creativos encargado de la obra, grafiteros de corazón, se distingue por el nombre “Germen Crew”. 452 familias o 1.808 habitantes de este barrio se han visto beneficiados por este proyecto, que promueve una convivencia sana y creativa entre los vecinos de la comunidad y a partir de ahí lograr la erradicación de la violencia y la marginación.

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Fuente: Bored Panda