Declarado como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, la casa estudio de Luis Barragán sigue impresionando por sus formas y disposición del espacio.
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Por fuera parece una construcción más, sobre todo porque su fachada se ha conservado todos estos años en gris cemento, pero fue la vivienda de uno de los más célebres arquitectos del mundo y está considerada como un ejemplo y objeto de análisis de los estudiosos del arte.
Ubicada en Tacubaya, barrio del poniente de la Ciudad de México, la vivienda del célebre arquitecto tapatío Luis Barragán fue proyectada por él mismo y se construyó en 1948. Se trata de una representación del momento creativo que vivía el artista a mediados del siglo XX y se conserva tal y como él la dejó, tanto en colores como en decoración y disposición del espacio.
La estructura de este inmueble está constituida por elementos tradicionales y vernáculos de la arquitectura mexicana en conjunción con los elementos que esta disciplina retomó de las tendencias internacionales de la época. Los grandes vanos de la construcción se conjuntan con los muros macizos que toman formas geométricas, lo que da una sensación de claroscuros a lo largo y ancho de más de mil metros cuadrados de terreno. El gran jardín hace acto de presencia en el interior de la vivienda gracias a estos enormes vanos, sobre todo con los ventanales.
La casa estudio de Luis Barragán fue declarada como patrimonio cultural de la Humanidad de la Unesco en 2004 por conjuntar en una sola obra elementos tradicionales locales con tendencias internacionales y las consideraciones filosóficas que ello conlleva.