Si piensas que fue con el surgimiento de Photoshop y otras herramientas digitales que la edición y corrección de fotografías comenzó estás muy equivocado, desde muchos años antes y con técnicas completamente análogas, los creativos de la fotografía ya retocaban los negativos y eliminaban imperfecciones.

Desde el siglo XIX, cuando aún se desarrollaban y perfeccionaban las técnicas de fotografía, ya se manipulaban los negativos a través de sustancias químicas y pinturas que se le aplicaban para lograr mayores contrastes y emular nubes, sombras y otros efectos visuales.

Además de los químicos, a los retratos fotográficos se les podía dar tratamiento por medio de papel y grafito que permitía acentuar rasgos en el rostro de los sujetos capturados por la lente. Por su parte, el papel se ponía en la porción posterior de los negativos y ello permitía dar efectos luminosos diferentes a los que se habían enfocado originalmente.

Incluso se llegó a utilizar la albúmina, una proteína que se extrae del huevo, para obtener una espuma que recubre el papel fotográfico y logra un efecto visual similar al esmaltado que las maderas y otros elementos visuales pueden tener.

Todas estas técnicas de edición y retoque de fotografías fueron desapareciendo a medida que avanzó el desarrollo tecnológico y desembocó en las múltiples posibilidades que hoy ofrece la edición digital por medio de múltiples programas informáticos.

shutterstock_121254985

Imágenes: Shutterstock