De la tonalidad y la cromática seleccionada en un diseño o composición visual depende mucho del carácter que que asume y el efecto visual que confiere al espectador.

A los colores se les puede agrupar entre fríos y cálidos, recordemos las características de  cada una de estas modalidades, las hemos ilustrado con las imágenes fotográficas de la creativa mexicana Ana Cris Burgos.

Los colores cálidos van del rojo al amarillo, pasando por sus combinaciones y tonalidades, mientras que los los colores fríos transitan entre el azul al verde.

Esta diferencia se explica por la percepción del ojo humano y las sensaciones que produce, por la experiencia de estos colores en la naturaleza: así como los rojizos y amarillos evocan al fuego y a la luz, un azul puede evocar el elementos húmedos y sin calor o un verde, la frescura de la vegetación.

Se trata de sensaciones térmicas subjetivas que en el diseño resultan de gran utilidad para determinar colores y transmitir diversas sensaciones. Los colores fríos y los cálidos se complementan, del mismo modo que con un color primario y uno compuesto.

Colores fríos

Colores cálidos