La imagen corporativa representa la principal cara de una organización o conjunto de personas que trabajan para un determinado, su importancia es tal, que debe representar de manera visual los esfuerzos y voluntades colectivas.

Todo proceso de diseño de imagen corporativa conlleva sus etapas necesarias para asegurarse un éxito respetable y te las vamos a enumerar a continuación, considéralas en tu próximo proyecto y notarás que con orden y estructura obtendrás buenos resultados. Observa además los diferentes ejemplos de imagen corporativa.

1. Lectura y análisis conjunto del Brief, que debe ser una labor de equipo para que el diseñador o creativo visual pueda desarrollar lo visual del proyecto con una visión integral.

Black Bass – Branding, por Salvador Anaya

2. Dialogo permanente y de principio a fin entre diseñador y cliente para una revisión detallada y constante de los logros y ubicación de las áreas que se pueden mejorar.

ArquIntegrada Branding, por  Hachetresele Studio

3. Exposición de los conceptos visuales y evaluación racional con base en el nivel de eficacia e impacto y cumplimiento de los objetivos iniciales planteados originalmente.

Enea – eroi in ricerca onlus, por  Jona Sbarzaglia

4. Consenso entre las partes involucradas en el proceso creativo acerca de las decisiones y alternativas elegidas y avance en los detalles  las mismas.

Siris, por Nico Graph

5. Periodos de adaptación y pruebas visuales, si es posible someterlo a la opinión de otras miradas -expertas y no expertas-  es conveniente.

Electricitat Roses, por  Carlos Álvarez

El resultado final de tu proyecto de imagen o identidad corporativa dependerá de la capacidad de sortear las dificultades que surjan durante el proceso de creación de una imagen corporativa. Una etapa de ajustes posteriores no está mal siempre que lo estipules desde un principio.