Las grandes marcas y empresas salen de grandes crisis. Pero esto recién mencionado no queda para la gente común y corriente, quienes se agachan y aceptan lo que dice el sistema. En pocas palabras te resignas por aceptar que no hay otra opción y que ni modo. Como la Ley de Herodes.

La primera oración de esta columna sí aplica para los que piensan y practican en contra del status quo. Para aquellos que se pueden y saben adaptar en innovar y crear conceptos pensados, pero que pocos los practican. Al hablar de una crisis es hablar de una unión de sociedad rosando la fraternidad y carisma de un solo objetivo, pero de diferentes métodos e ideologías.

Es como si la única opción para moverte en la ciudad sea en carro por muy chica, mediana o grande que sea. En
Chihuahua no tenemos identidad. Cada güero, pelirrojo, negro u ojos rasgados que veamos lo hacemos como bichos raros. No estamos acostumbrados a adoptar de una manera como se debe al turista extranjero o nacional. Somos mexicanos, pero nos creemos estadounidenses. Nos quejamos del dólar, pero cada vez que se pueda vamos a Hell Paso (El Paso, Texas).

Al subirnos a un taxi nos tienen que dejar dos cuadras antes del destino para que la sociedad elitista no diga: “ash, no maaaaaa ¿Te veniste en taxi? Qué oso eeeeeehh” Es más si de esas charlas de viernes por la noche se te sale que tienes conocimiento de la ruta del Panamericana o del Circunvalación 1 vas a ser la persona más ‘buleada’ de la noche.

Es muy complicado que nos unamos como sociedad para exigir una o varias instancias. Redefinir que sería lo mejor para nuestra sociedad y diseñar un método funcional con mayor calidad de vida. Al haber pocas cosas que hacer en la sociedad hace que no interactuemos con otros núcleos sociales. En pocas palabras es muy complicado conocer a alguien nuevo. Si no tuviste amigos en la prepa o universidad ya no los tuviste.

Pero esto mencionado son puras patrañas y pretextos. Ahora en la ciudad y en el estado se está manipulando el suministro de gasolina. Para ponerle $300.00 MN es espera más de una hora. Simplemente porque al gobierno se le ocurrió manifestar su enojo al ganar la oposición después de 18 años.

Muchas manifestaciones por redes sociales se hacen notar al no tener gasolina. ¿Cómo le voy a hacer para ir a misa si no tengo gasolina? Es simple. Agarre un taxi o UBER (que el día viernes 24 de este mes arribó a nuestra ciudad) Póngase de acuerdo con los vecinos y hagan ronda. Para las actividades de tus hijos o las idas al café con tus amigas puedes hacer exactamente lo mismo. Pero claro, primero va el ego o el “que pena”. Sinceramente veo esto como una oportunidad de unión entre vecinos de tu calle, colonia. Dónde todos se pueden poner de acuerdo para una sola causa. Aprovechar el transporte público. Que seguramente si vives en Chihuahua muy pocas veces te has subido. Pero hazlo y ve las pésimas condiciones de este medio y exige una propuesta para una mejor solución de construcción ciudadana. No puedes exigir sin ver. Por lo tanto tampoco lo puedes solucionar.

Si también eres de los que se queja, de la misma manera propón una o varias soluciones. Es que tu comunidad pertenezca a la misma d una manera inteligente integrando los talentos de los miembros. Comparte lo que tanto te has guardo pues bien, a tu alrededor te lo van a agradecer. Has la prueba en casa y genera ideas para diseñar un método de ahorro de gasolina y de integración y colaboración social o pública. ¿O eres de los que dicen: “Ash no que oso. Esto no pasaría si estuviera en el primer mundo”.