Si detectas que tu marca (la empresa para la que trabajas) se está haciendo vieja o ya es disfuncional, entonces ha llegado el momento someterla a un proceso de rebranding.
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DesignShack publicó los 5 caminos para iniciar el rebranding para refrescar a una marca. Cabe destacar que estos puntos buscan hacer más fácil este proceso.
1. Construye una historia
Las historias suelen crear engagement con las personas, por lo que es importante analizar si la marca tiene una historia, saber cuál es, cómo la historia describe a la empresa /producto o marca; es coherente con el mensaje visual; y lo más importante es que si el diseño actual coincide con el diseño. Esta preguntas deben ser respondidas y analizar detenidamente qué es lo que se puede hacer con la historia detrás de la empresa.
2. Actualiza las imágenes
En este proceso un paso muy sencillo de hacer es revisar las imágenes que utiliza la marca. Esto puede ser la solución más rápida. Es importante revisar que tan viejas son las imágenes que se utiliza, por ejemplo revisar la ropa y los peinados. En ocasiones se pueden mezclar las viejas imágenes con nuevas.
Si el stock de fotos no es tan viejo, puede ser usado y cambiar las fotos que se utilizan actualmente. Si no se cuenta con mucho presupuesto, un efecto en la fotografía puede ser la manera de refrescar la imagen.
3. Cambia la paleta de colores
En este aspecto hay tres opciones:
* Considera una nueva paleta de colores. Es la más costosa de todas, pero es importante analizar si los colores que tiene la marca funcionan, como por ejemplo no se reproducen bien o son difíciles de manejar.
* Si cosieras que el esquema de color es soso, prueba con una mezcla de color brillante para la gama de colores estándar. Utiliza colores saturados con blanco o negro.
* Añade un color alternativo. La mayor parte de las marcas tienen un máximo de tres a cuatro colores. Pero puede probar con uno que sea alternativo, quizás sustituyendo el cuarto o agregando un cuarto. Recuerda no usar un quinto color y sólo úsalo para dar acentos.
4. Cambia la tipografía
En cuanto a tipografía hay dos caminos: cambiar el tipo de letra o el modo de usar una tipografía. Este último se refiere al uso de negritas, cursivas, entre otras opciones que existen para las tipografías y que pueden causar más impacto en una marca.
Por ejemplo, las el uso de texto en gran tamaño o las llamadas cabeceras de héroe causan gran impacto. Cabe destacar que los casos más recientes han hecho más bien cambios en las tipografías, más que en el logo.
5. Prueba con las tendencias
Si no estás seguro del cambio que buscas implementar, puedes darle un toque diferente al combinarlo con una tendencia de diseño, por ejemplo, si el logotipo es en 3D, prueba en flat. Las tendencias pueden darle un giro nuevo sin tener que gastar mucho.
