La experiencia de ir a un Starbucks está entrelazada con la estancia de las personas en el lugar, pues regularmente después de pedir se toman un tiempo para leer, platicar o conectarse, pero eso ya no será así.
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Al menos en cuatro tiendas de la cadena de Starbucks, la experiencia será diferente, pues la firma ha rediseñado su modelo para agilizar los pedidos y está pensada para las personas que sólo quieren su café antes de llegar al trabajo.
De esa forma han colocado una barra en la entrada en la que un barista se enacargará de tomar el pedido del cliente y en poco tiempo sólo deberá ir a recogerla al mostrador.
El espacio de Starbucks sólo ocupa sólo 163 metros cuadrados y el objetivo es simplificar la entrada y salida de las personas, aunque se espera que la fila de espera sea corta, es posible que el éxito haga de las suyas y si existan las interminables formaciones en horas pico.
De acuerdo a Fast Co. el diseño es un cambio radical para Starbucks, pues todos están acostumbrados a pasar más tiempo en las cafeterías para trabajar con su laptop, navegar en sus dispositivos móviles o pasar el rato.
Sólo existe una tienda de este tipo y está en Wall Strer, el distrito financiero de Nueva York, pero pronto la cadena de la melusina abrirá más locales similares, aunque cabe destacar que existe un local parecido en la avenida Reforma, en la Ciudad de México.