Tu labor como diseñador gráfico tiene valor y por ello debes recibir una remuneración por tu trabajo profesional, sin embargo, hay ciertas circunstancias por las cuales podrías no cobrar.
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Si bien todo trabajo cuesta dinero y debe ser recompensado de una manera justa, existen ocasiones en las que es factible no pedir cobro alguno y saber que la recompensa se traduce en especie y no en plata. A continuación enumeramos tres casos en los que es mejor no cobrar dinero por tu labor como diseñador gráfico.
1. Experiencia
Esta situación es más frecuente entre los creativos de la imagen que comienzan su vida profesional e incluso se encuentran en los primeros años de su formación académica. Si bien lo ideal es siempre recibir un pago por tu labor, tal vez te resulte conveniente aceptar tareas no remuneradas si el beneficio se traduce en experiencia y en un portafolios cada vez más grueso.
2. Amigos y familiares
Seguramente en ocasiones tu deseo por hacer algo por tu gente cercana puede colocar tus tarifas por debajo del promedio y hasta trabajar sin cobrar. Pero para evitar problemas o confusiones, más vale que establezcas las condiciones de trabajo siempre que lo hagas para familiares y amigos y dejarles claro que por tratarse de una entrega de bajo o nulo costo, está se puede postergar por trabajos más prioritarios y que sí serán pagados.
3. Trabajo social
El trabajo social es una labor que te dará experiencia y te ayudará a cumplir con un requisito escolar necesario. Ahí tienes ya un pago en especie, pero esa no es tu única recompensa: realizar acciones en beneficio de la sociedad y tu comunidad representa por sí sola una satisfacción.
Fuente: Fondosxat
