Esta es la segunda parte de las series de consejos para aprovechar mejor nuestro tiempo y salir más temprano del trabajo que todos los demás. La mayoría de los proyectos de diseño siempre implican una parte creativa y una técnica. Muchas veces cuando se corretea la creatividad puede terminar bloqueando la mente del diseñador, así que siempre para esta parte es mejor mantener un ritmo natural sobre cómo nos imaginamos y concebimos los productos o diseños.

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Pero es la segunda, en la que nos ensuciamos la mano con el teclado, la que podemos apurar e incluso mejorar. A continuación algunos consejos que seguramente podrías aplicar:

1. APRENDE A USAR BIEN LOS PROGRAMAS

A veces nos conformamos con lo que nos enseñaron en la escuela, pero cada programa tiene sus atajos y secretos que, una vez que los descubrimos, podemos sistematizar nuestros procesos. Por ejemplo, en InDesign muy poca gente sabe que los índices se pueden generar automáticamente a través de los estilos, que se pueden crear folios automáticamente a través de las hojas maestras o que se puede pedir al editor que revise los textos de nuestro archivo sin que él tenga el programa. En Illustrator puedes repetir el último movimiento que hiciste presionando comando-D y en Photoshop, puedes convertir cientos de archivos de RGB a CMYK con un solo comando.

Es cierto que prácticamente nadie explota un programa al 100%, pero si logramos dominar solo aquellas herramientas que podemos aplicar directamente a nuestros sistemas de trabajo la vida será mucho más fácil.

2. USA LOS PROGRAMAS PARA LO QUE SON

Conozco a muchos que prefieren hacer un folleto en Illustrator o un logo en Photoshop, cuando bajo ciertas circunstancias el trabajo podría hacerse mejor en los programas especializados para cada cosa. Si somos fans de un programa en especial procuramos resolver todo desde allí, pero puede resultar una falsa sensación de dominar un proceso que podríamos hacer mejor en otro lado.

3. BUSCA ESTABLECER UN RITMO

Cuando debemos sacar trabajos rápido y bien, hay que voltear a ver cómo se hacen los procesos en otras industrias, como en las armadoras de autos. No hay una persona o robot haciendo todo el coche, más bien, uno coloca los asientos, otro el tablero, otro pone las llantas y otro lo pinta. Si establecemos un proceso donde primero ponemos todas las fotos, luego todos los textos y al final los arreglamos, en ves de poner una foto, poner un texto, arreglarlo y seguir con el siguiente lograremos una forma mucho más efectiva y con menos detalles que corregir.

Parecería muy obvio, pero a veces veo a los diseñadores hacer este proceso de forma que se vuelve lento y tedioso.

En la medida en que podamos establecer mejores procesos de trabajo, llegará el momento en el cual aplicaremos un sistema tan lógico, que buscaremos en los programas cómo aplicar nuestras ideas en vez de estar atenidos a lo que ellos pueden hacer o peor aún, lo que nosotros no sabemos que pueden hacer.

Design Lifer
Diseñador gráfico con maestría en diseño editorial por la Universidad Anáhuac y con cursos de Publishing en Stanford. Actualmente dirige MBA Estudio de Diseño, dedicado al diseño editorial, identidad y publicitario, además de realizar scounting y contratación de talento de diseño para diferentes empresas. Es profesor en la Universidad Anáhuac y la UVM. Le gusta la caligrafía, tipografía, la música y la tecnología.